Fracturas de la cadera

En pacientes mayores de 70 años, las fracturas de la cadera son consideradas, junto con las fracturas de muñeca, las más comunes.

Causas

Ocurren por una caída o contusión directa en la cara lateral de la cadera. Algunas condiciones como osteoporosis, cáncer o lesiones por estrés pueden debilitar el hueso y hacerlo más susceptible a su ruptura. Dependiendo de la gravedad de la patología, el hueso puede llegar a fracturarse al estar apoyando su peso al estar parado y girar el cuerpo hacia cualquier lado.

Síntomas

El paciente presenta dolor en el tercio superior del muslo o ingle, el cual se exacerba ante cualquier intento por flexionar o rotar la cadera. En algunos casos donde el hueso se encuentra muy debilitado, como ocurre en pacientes con cáncer o con lesiones por estrés, el dolor en dicha zona puede presentarse por un periodo de tiempo antes de fracturarse.

En caso de presentar una fractura completa, la pierna se encuentra acortada respecto a la sana. Así mismo, el pie y rodilla se encontrarán rotados hacia afuera.

Diagnóstico

El diagnóstico se lleva a cabo mediante radiografías. Éstas podrán determinar si la fractura se encuentra desplazada o no, número de fragmentos, así como si se encuentra por dentro o fuera de la cápsula articular.

En algunos casos, el trazo de fractura no es notable en radiografías y la sospecha clínica no será suficiente. En estos casos, se pudiera solicitar una tomografía y/o resonancia magnética para confirmar el diagnóstico.

Tratamiento

El tratamiento se basa nuevamente en la ubicación de la fractura (dentro o fuera de la cápsula) edad del paciente, nivel de actividad previo a la lesión. En la mayoría de los casos se requiere tratamiento quirúrgico. El objetivo de la cirugía es que el paciente se pueda movilizar lo más pronto posible para iniciar un protocolo de rehabilitación para reeducar la marcha y fortalecer la musculatura.

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